La Mula no fue solo una bestia de carga; fue el motor biológico que conquistó la topografía imposible de la Cordillera Central. Su híbrida genética le otorgó la tenacidad, la resistencia y la inteligencia necesarias para transportar el café, la papa, el oro y la civilización a través de las trochas de herradura, convirtiéndose en un símbolo sagrado de la pujanza y el progreso antioqueño.
Las fondas de arriería fueron espacios de descanso y sociabilidad en los caminos andinos. Más que “paisa”, su historia refleja poblamiento diverso y música viajera. El bambuco, nacido en el Cauca afrodescendiente, halló eco en corredores rurales, donde cultura y resistencia se hicieron canción.
El 13 de noviembre de 1985, la erupción del Nevado del Ruiz borró a Armero y golpeó con furia a Chinchiná y Villamaría. Miles de muertos invisibles, jornaleros sin registro y comunidades olvidadas quedaron bajo el barro. La crónica revive la memoria, la deuda y el legado de esa tragedia.
Las “Crónicas de Arriería” nacen como un homenaje a los animales, hombres y objetos que hicieron posible la colonización antioqueña. Tras el buey, llega la mula y, con ella, el arriero: figura esencial que abrió caminos, fundó pueblos y dejó una huella cultural que aún late en el viejo Caldas y regiones vecinas.
Los especialistas advirtieron que esta fecha será determinante para esclarecer el verdadero origen del cometa, cuya trayectoria ha despertado inquietud científica. En respuesta, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio activó el protocolo de defensa planetaria ante el posible riesgo del objeto interestelar.
Cada octubre, Trevelin se transforma en un lienzo natural de tulipanes. Más de un millón de flores despiertan al pie de la cordillera, ofreciendo una experiencia visual y emocional única. El cultivo, paciente y preciso, convierte la Patagonia en símbolo de belleza, resiliencia y esperanza.
Desde San Félix y Salamina: Narra su vínculo con la comunidad, su papel como cronista generacional y la lucha por la verdad frente a las difamaciones del alcalde Manuel Fermín, desenmascarando su estrategia de manipulación y defendiendo la memoria colectiva con firmeza y ética.
La finca El Cedral, antiguo cuartel del General Cosme Marulanda, es símbolo histórico de Salamina. Hoy, en ruinas y olvidada, representa el abandono del patrimonio rural. Su restauración debió ser prioridad en el bicentenario, pero fue eclipsada por fiestas y desinterés institucional.
Desde su fundación en 1825, Salamina ha sido moldeada por sus mandatarios, quienes han dirigido sus destinos entre progreso y desafíos. Esta crónica recorre dos siglos de liderazgo, conflictos, modernización y resiliencia, destacando el impacto de la administración municipal en el desarrollo de la «Ciudad Luz».
Salamina despide con profundo dolor a dos hombres ejemplares: Marco Velázquez, futbolista y apasionado por los caballos, y Otoniel Vanegas, ebanista y líder social. Esta nota es un homenaje a su legado y un mensaje de apoyo a sus familias.
Aunque la historia de la colonización antioqueña suele centrarse en los hombres, las mujeres desempeñaron un papel fundamental como sembradoras, cuidadoras, comerciantes y líderes comunitarias. A través de su trabajo diario, su capacidad de resistencia y las redes de solidaridad que tejieron, ellas garantizaron la supervivencia y el desarrollo de las nuevas comunidades.
Más de 1300 jinetes revivieron la gesta fundacional del Viejo Caldas con una mulada histórica que recorrió los antiguos caminos de la colonización antioqueña, honrando la memoria del arriero y del fundador de Salamina, Vicente Fermín López Buitrago.
El Día del Trueque del Libro y los Juegos Tradicionales reunieron a niños, jóvenes y adultos en una jornada que honró la memoria, el saber compartido y las raíces ancestrales en la cuna del Paisaje Cultural Cafetero. Este evento tiene una filosofía particular que lo distingue: los libros que circulan en esta jornada son libros viajeros.
Un viaje a Salamina para reencontrarse con un amigo se convierte en un encuentro sobrenatural con Clementina, una bruja que revela los misterios de la vida y la muerte, desafiando el escepticismo y dejando una huella imborrable.
Argentina ha demostrado una vez más que la solidaridad no conoce límites. La catástrofe en Bahía Blanca despertó un torrente de ayuda y compromiso de ciudadanos de todas las latitudes, mostrando que la unidad en tiempos de crisis es su mayor fortaleza.
El Bicentenario de Salamina, Caldas, enfrenta una alarmante falta de gestión por parte de la administración municipal. Sin planificación clara ni eventos de impacto, la celebración corre el riesgo de ser irrelevante. Aún es posible rescatar la ocasión con iniciativas culturales y alianzas estratégicas.
En el marco del Bicentenario de Salamina, este proyecto propone un modelo integrado de promoción digital que combina investigación de mercado, uso estratégico de redes sociales, optimización de sitio web y capacitación comunitaria. A través de herramientas como micrositios interactivos, campañas de retargeting, alianzas con influencers y análisis de datos en tiempo real, se busca maximizar la visibilidad del evento, atraer turistas nacionales e internacionales y consolidar a Salamina como referente cultural del Eje Cafetero. El plan incluye fases pre-evento, durante y post-evento, garantizando un legado digital duradero que fortalezca la identidad patrimonial de la ciudad.
Salamina, Caldas, es un tesoro histórico y cultural colombiano, fundado en 1825. Su arquitectura colonial, con casas de bahareque y balcones floridos, le valió el título de Patrimonio Cultural, Cuna del Paisaje Cultural Cafetero Colombiano y Ciudad Luz de Colombia, llega a su bicentenario.
La familia Gómez desempeñó un papel fundamental en la fundación y administración de Salamina, con varios de sus miembros ocupando la alcaldía entre 1832 y 1890. Su influencia dejó una huella profunda en la historia política, social y cultural del municipio.
El Chaltén, desde sus glaciares hasta el místico Calafate, pasando por el majestuoso Cerro Fitz Roy. Esta joya no solo encierra paisajes deslumbrantes, sino historia de un territorio salvaje y virgen, donde la naturaleza parece haberse detenido en el tiempo.